Hace
un mes y medio realice la épica Marató del Montseny y realmente fue
un reto para mi, habían muchos hándicaps que jugaron en mi contra y
que tuve que superar y sin duda no lo habría conseguido sin ser
fuerte de mente y con una buena motivación. Tenia poco tiempo ademas
tuve una lesión justo el periodo en el que debía acumular mas
volumen de km que me tubo en el dique seco ademas de un fuerte dolor
la semana de la competición en cervicales y brazo izquierdo que me
tuvo casi bloqueado hasta el día antes de la carrera (gracias Oscar
Layos por la reparación de urgencia).
Así
que mi preparación cambio por completo, Tenia 4 semanas escasas para
preparar la carrera.
Mi
preparación consistió en lo siguiente :
A. Bajar
peso a razón de 1 kg por semana, finalmente me saque 4,5 kg y
creerme realmente se nota, sino probar de salir a correr 5 km con una
botella de 2litros en cada mano y luego 5k mas sin,... notareis la
diferencia y es brutal. Esto me creo algún inconveniente, salir a
hacer ejercicio con una baja carga de hidratos te da una buena
flojera y tienes que tirar mas de grasas, pero de eso se trataba (no
es recomendable, aunque estaba bien asesorado por un nutricionista
deportivo).
B. Correr
todo lo posible el poco tiempo que tenia. Hacia algún tiempo había
leído un articulo de un método extremo de entrenamiento que usaban
las selecciones chinas y australianas “crash training” que
consisita básicamente en doblar entrenamientos durante el máximo
tiempo posible y luego recuperación activa el mismo tiempo que
habías doblado,... y así sucesivamente. Para problemas radicales
soluciones radicales,...
C.
Y la parte mas importante trabajar el coco. Yo lo que hice fue un
trabajo psicológico para preparar lo que se me venia encima, a base
de mirar videos, escuchar música y de leer mucho, ademas de conocer
y respetar los retos, la maratón de montaña y El Montseny.
Hice
un trabajo de preparación tal que sustituiría a la física, es
evidente que a un evento de esta envergadura no puedes ir de rositas,
sin haber dado un palo al agua, pero cuando llegas tarde y mal, viene
muy bien estar mentalizado de lo que se te viene encima, y haberte
creado un escudo o una tolerancia al sufrimiento, dolor, situaciones
adversas ademas de llenarte de ilusión y energía. El secreto fue
darle la vuelta a la tortilla, pensar en cualquier otra cosa que no
estuviera relacionada con el echo de correr, el entorno, los amigos,
las tías buenas que nunca te harán caso... el trabajo, las facturas
por pagar, las que te gustaría cobrar algún día,... aprender a
correr por inercia sin la necesidad de pensar en ritmos, tiempos,
zancadas ni técnicas, visualizar momentos buenos pasados y por
pasar, imaginarte finisher. Y cuando lo consigues se te pasan las
horas y los km volando, disfrutas mas de correr y todo lo que ello
conlleva.
Ahora
, pasado un tiempo me doy cuenta que correr en aquellas
circunsatancias en que lo hice, bajo y mal de forma fue una burrada
por mi parte y que lo que me salvo el tipo sin duda fue la motivación
por superar los objetivos que me propongo y la alta capacidad de
sufrimiento que tengo y que voy incrementando poco a poco y que fue
determinante para cruzar los 42.195 m y 5400 m de desnivel
acumulado. En resumen lo que quiero decir es que la fuerza de la
mente vale muchísimo y en este tipo de retos llevar una buena
preparación mental es garantía de éxito, aunque no os relajéis y
entrenar duro!!!